Día 5

Novena a la Divina Misericordia

QUINTO DÍA

Hoy, tráeme a las almas de los hermanos separados y sumérgelas en el mar de mi misericordia. Durante mi amarga pasión, desgarraron mi cuerpo y mi Corazón, es decir, mi Iglesia. Según regresan a la Iglesia, mis llagas cicatrizan y de este modo alivian mi pasión.

Jesús misericordiosísimo que eres la bondad misma, tú no niegas la luz a quienes te la piden. Acoge en la morada de tu compasivísimo Corazón a las almas de nuestros hermanos separados y llévalas con tu luz a la unidad con la Iglesia y no las dejes escapar de la morada de tu compasivísimo Corazón sino haz que también ellas glorifiquen la generosidad de tu misericordia.

Padre eterno, mira con misericordia a las almas de nuestros hermanos separados, especialmente a aquellos que han malgastado tus bendiciones y han abusado de tus gracias por persistir obstinadamente en sus errores. No mires sus errores, sino el amor de tu Hijo y su amarga pasión que sufrió por ellos, ya que también ellos están encerrados en el compasivísimo Corazón de Jesús. Haz que también ellos glorifiquen tu gran misericordia por los siglos de los siglos. Amén.

Corona a la Divina Misericordia

LLAMADO DE AMOR Y CONVERSIÓN DEL SAGRADO CORAZÓN EUCARÍSTICO DE JESÚS

Yo, pequeña alma víctima, hoy, solemnemente prometo a las almas que oren y amen las Devociones del Apostolado, imprimir mi Divino Rostro en sus almas y transformarlas en pequeñas Jesús-María. Es decir, que serán copias vivas de nuestros Dos Corazones en la tierra.

Dichosos serán los que obedezcan mis Últimos Llamados.

21 de febrero del 2023

CORONA DE LA MISERICORDIA DE JESÚS Y DE MARÍA
(Dictada el 3 de marzo del 2024 a Manuel de Jesús por Dios Padre Tierno y Misericordioso)

¡Ave María Purísima, sin pecado original concebida!

Por la señal de la Santa Cruz

de nuestros enemigos

líbranos, Señor, Dios nuestro.

† En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Abre Señor mis labios y mi boca proclamará tus alabanzas.

Ven ¡Oh, Dios! en mi ayuda. Señor, date prisa en socorrerme.

Acto de Contrición

Señor mío, Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Tú quién eres y porque te amo sobre todas las cosas, me arrepiento de todo corazón de todo lo malo que he hecho y de todo lo bueno que he dejado de hacer, porque pecando te he ofendido a Ti, que eres el Sumo Bien y digno de ser amado sobre todas las cosas.

Ofrezco mi vida, obras y trabajos en satisfacción de mis pecados. Propongo firmemente, con la ayuda de tu gracia, hacer penitencia, no volver a pecar y huir de las ocasiones de pecado. Señor, por los méritos de tu Pasión y Muerte, con los cuales Tú expiaste por mis pecados, ofreciendo un dolor tan grande e intenso que te hizo sudar Sangre, apiádate de mí. 

Madre mía del Cielo, alcánzame de Jesús este suspirado perdón. Amén.

Oración de Invocación al Espíritu Santo (dictada el 28 de octubre del 2014)

Ven, mi Dios Espíritu Santo, a través de la poderosa intercesión del Corazón Doloroso e Inmaculado de María, tu amadísima Esposa.

Ven, mi Dios Espíritu Santo, a través de la poderosa intercesión del Corazón Doloroso e Inmaculado de María, tu amadísima Esposa. 

Ven, mi Dios Espíritu Santo, a través de la poderosa intercesión del Corazón Doloroso e Inmaculado de María, tu amadísima Esposa. 

Oración

Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el Fuego de tu Amor.    

V/. Envía tu Espíritu y todo será creado. R/. Y renovarás la faz de la tierra. 

Oración

¡Oh, Dios! que iluminaste los corazones de tus hijos con la Luz del Espíritu Santo, haznos dóciles a sus inspiraciones para gustar siempre el bien y gozar de su consuelo, por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

Oración al Divino Espíritu Santo (dictada el 15 de agosto del 2014)

Divino Esposo de María Santísima, mi Dios y Señor Espíritu Santo, enciende en cada alma el Fuego de un Nuevo Pentecostés, para que nos consagres como apóstoles del Corazón Doloroso e Inmaculado de María y apóstoles de los Últimos Tiempos, protege con tu sombra a la Iglesia católica, salva a las almas del mundo y realiza el reino Inflamado de amor de los Corazones Unidos de Jesús y María. Amén.

Oración al Corazón Doloroso e Inmaculado de María

Doloroso e Inmaculado Corazón de María, habitación pura y santa, cobijad mi alma con vuestra maternal protección. Por este medio, permaneceré fiel a la voz de Jesús y mi alma podrá corresponder a su amor, y obedecer su Divina Voluntad.

¡Oh, Madre mía! mi deseo es mantener ante mi vista, sin cesar, vuestra participación de Corredentora. Con este recuerdo viviré íntimamente unido a vuestro Corazón Doloroso e Inmaculado, que siempre permanece totalmente unido al Sagrado Corazón Eucarístico de vuestro Divino Hijo.

Por los méritos de vuestras virtudes y angustias, clavadme a este Divino Corazón, protegedme ahora y siempre. Amén.

Credo de los Apóstoles

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

Siete misterios

En la Cuenta Grande:

Padre Nuestro

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.

Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras deudas, como nosotros perdonamos a nuestros deudores; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del maligno. Amén.

Ave María de los Últimos Tiempos

Dios te salve, María, llena eres de Gracia, el Señor está Contigo. Bendita Tú eres, entre todas las mujeres, y bendito es el Fruto de tu Vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, Corredentora de las almas, ruega por nosotros pecadores, y derrama el efecto de Gracia de tu Llama de Amor, de tu Doloroso e Inmaculado Corazón sobre toda la humanidad, ahora, y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Diez Veces:

Sagrado Corazón Eucarístico de Jesucristo, Hijo de Dios Padre Tierno y Misericordioso ten misericordia de mí, pecador. Amén. 

Jaculatoria:

María Corredentora de las almas, Madre de Dios y Madre nuestra, sálvanos por la Llama de Amor de tu Doloroso e Inmaculado Corazón. Amén. 

Al finalizar tres veces:

Sagrados Corazones Unidos de Jesús y de María, derramen las gracias de la Divina Misericordia sobre toda la humanidad y sobre mí, pecador. Amén.

Oración final

Misericordiosísimos Corazones de Jesús y de María su bondad es infinita y los tesoros de sus gracias son inagotables.

Confío enteramente en la Misericordia de sus Sagrados Corazones Unidos que supera todo mal. 

Me consagro enteramente a la infinita misericordia de sus Sagrados Corazones Unidos, para vivir como esclavo y apóstol de sus Corazones Misericordiosos.

Deseo propagar su misericordia, por medio de obras espirituales y corporales de caridad, sus Sagrados Corazones Unidos me protegerán como hijo especial, yo temo todo de mi debilidad y espero todo de su gran misericordia. 

Que toda la humanidad conozca las infinitas gracias de su gran amor misericordioso y ponga toda su esperanza en la Alianza de sus Sagrados Corazones Unidos por el Espíritu Santo y alabe esta Alianza de Misericordia por toda la eternidad, Amén.

† En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Ave María Purísima, sin pecado original concebida.