Mi querido hijo, pequeña nada de mi Sagrado Corazón Eucarístico:
Yo, como Sumo y Eterno Sacerdote del Padre Misericordioso, vengo a reunir a todos mis sacerdotes. Quiero reunirlos como un gran Ejército Sacerdotal de los Últimos Tiempos. Quiero reunirlos junto a mi Vicario, el Santo Padre. Y deseo derramar el Espíritu Santo para que todos mis sacerdotes reciban el Don del Amor.
Con mi Sagrado Corazón Eucarístico y el Espíritu Santo deseo renovar a mis sacerdotes y hacerlos uno en el amor. Todos los sacerdotes deben ser apóstoles de nuestros Sagrados Corazones.
Ofrécete, pequeña nada, por ellos y las intenciones de Nuestros Dos Corazones Unidos.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Ave María Purísima sin pecado original concebida.
Leer Reflexión del Llamado de Amor y Conversión del Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús del 27 de octubre de 2022