Mi Corazón Doloroso e Inmaculado ha venido, en Divina Voluntad, a revelarse a toda la humanidad, porque la Santísima Trinidad desea que todo el mundo se consagre a Mi Corazón Doloroso e Inmaculado.
He venido a transmitir Mis Últimos Llamados de Amor y de Conversión para llamar a Mis hijos y reunir a todos Mis Apóstoles de los Últimos Tiempos en el Ejército de Nuestros Sagrados Corazones Unidos. Con esta Obra estoy reuniendo a Mi Ejército, y con los cenáculos de oración los estoy formando, enseñando, alimentando y educando.
Mis queridos hijos, abran sus corazones a Mis Llamados, medítenlos con inmenso amor. Profundicen, a la luz de la Palabra de Dios, en Mis Últimos Llamados y, así, disciernan los signos que Dios está dando para estos tiempos.
Mi Corazón es el Refugio de todos y por todos velo y oro, y deseo que todos cooperen conmigo y que vivan, desde ahora, el Triunfo de Mi Corazón obedeciéndome, viviendo Mis Llamados y orando con el corazón.
Les doy Mi Bendición Maternal, en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.