Queridos apóstoles de Nuestros Sagrados Corazones Unidos, Mi Amor Misericordioso se está derramando para todos los hombres como una Fuente de Agua Viva, y sólo los corazones abiertos a Mi Amor que viven en la pequeñez, en la sencillez y que anhelan vivir en paz, recibirán este Amor Misericordioso.
Porque es necesario, queridos hijos, que oren continuamente. Pero sus corazones deben estar dispuestos a recibir lo que en oración han pedido, a vivir lo que han pedido.
Queridos hijos, confíen que todo lo que piden en Mi Nombre, por intercesión del Corazón Inmaculado de Mi Madre Celeste, se les concede.
Hijos, toda oración, toda Santa Comunión, toda obra espiritual, deben hacerla en el Corazón Inmaculado de Mi Madre. Y lo harán todo en Divina Voluntad porque Mi Madre es la cumplidora perfecta de la Divina Voluntad.
Hijos, ábranme sus corazones. Hijos míos, anhelen vivir en Mi Amor Misericordioso.
Les doy Mi Bendición. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén