Los Sagrados Corazones Unidos de Jesús y de María proponen a los hombres a mi Casto y Amante Corazón.
Mi Casto y Amante Corazón debe ser para los apóstoles de los Dos Corazones: un ejemplo, camino y modelo.
Ejemplo de amor y servicio a Jesús y a María.
Camino de consagración total al Corazón de Jesús a través del Corazón de María.
Y, modelo de auténtico apóstol de estos Sagrados Corazones.
Por eso, nuevamente les exhorto. ¡Escuchen con el corazón los últimos Llamados de Amor y de Conversión!
Que la dureza del corazón sea vencida por la humildad, el amor, y la obediencia a nuestros Tres Sagrados Corazones.
Nuestro Apostolado es la obra que utilizamos para unir al Ejército eucarístico y mariano de estos últimos Tiempos y como padre y protector de este Ejercito los bendigo y los guardo en mi Castísimo Corazón.