Manuel de mi Sagrado Corazón Eucarístico:
El Padre Tierno y Misericordioso, en el Jardín del Edén, colocó dos corazones, a los primeros padres: Adán y Eva. Pero estos, con voluntad propia, pero también con la insinuación de Satanás, con el pecado rompieron con la gracia, y en ese mismo momento el Padre anuncia el remedio a ese pecado: a la Madre y al Hijo, la Inmaculada y al Redentor Hombre-Dios. Desde ese mismo instante se inicia la espiritualidad a nuestros dos Sagrados Corazones.
Es importante que mis apóstoles comprendan que con el espíritu de los Dos Santísimos Corazones inició la historia de la salvación y con la espiritualidad a nuestros Dos Sagrados Corazones tendrán su cumplimiento todas las profecías del fin de los tiempos. Oren y mediten en el libro de Apocalipsis, capítulo 4.
Con mi Sagrado Corazón Eucarístico los bendigo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.