Amado hijo de mi Sagrado Corazón Eucarístico:
Yo, el Cordero del Apocalipsis vengo en este tiempo a manifestarme bajo el gran título y la gran invocación:
El Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús
El Cordero del Apocalipsis es mi Sagrado Corazón Eucarístico y mi Corazón Eucarístico es el Cordero del Apocalipsis.
Hijo mío, yo deseo que todas las almas pudieran contemplar en mi manifestación el cumplimiento de esta Palabra, pues con el Apostolado el Espíritu Santo ha iniciado el tiempo de la Mujer Vestida del Sol, la Gran Señal, que es el Doloroso e Inmaculado Corazón de mi Mamá Santa y del Cordero que está reuniendo a su ejército de almas.
El Apostolado son nuestros Dos Corazones encontrándose con las almas.
Con mi Sagrado Corazón Eucarístico, el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, Yo los bendigo.
Mediten en el Capítulo 6 del Libro del Éxodo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.