Queridos hijos:
Alabado sea el Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús.
Hijos míos, abran sus corazones a través de la oración y de la fe, para que mis Llamados de Amor los acojan en su corazón y los puedan hacer vida.
Hijos míos, están viviendo un tiempo de misericordia. Con las apariciones de nuestros Sagrados Corazones Unidos ha comenzado el tiempo de la Mujer Vestida del Sol, que es mi Corazón Doloroso e Inmaculado; y el tiempo del Cordero de Dios, que es el Sagrado Corazón Eucarístico de mi Hijo Jesús.
La Gran Señal está con ustedes y les está dando los Últimos Llamados a la conversión y preparando el Reinado del Cordero de Dios: el Corazón de mi Hijo Jesús.
¡Escúchennos¡ queridos hijos, reparen con su escucha la indiferencia del mundo.
Yo, la Señora del Apocalipsis, la Mujer Vestida del Sol, el Doloroso e Inmaculado Corazón de María los bendice.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.