Hijos:
Los invito a abrir sus corazones a mi presencia de madre. A todos deseo conducirlos al Corazón de Jesús, para que encuentren en Él, el amor de Dios.
Queridos hijos, he venido como el Doloroso e Inmaculado Corazón de María a renovar el pedido de la consagracion del mundo entero a nuestros Sagrados Corazones Unidos, y a que renueven la Devoción de los Primeros Viernes y de los Primeros Sábados de modo perpetuo.
Queridos hijos, cada primer sábado me aparezco, en este mi Jardin, para trasmitir mi Llamado Maternal y para orar junto a ustedes, para que el mundo entero conozca el amor del Corazón de Jesus.
Esta es la intención especial de mi oración y mi aparición cada primer sábado.
Con mi Doloroso e Inmaculado Corazón los bendigo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.