Adora conmigo al Divino Corazón Sacramentado de mi amado Hijo, Jesucristo.
Mi pequeño Jesús-María:
En Stezzano mostré el Devocionario de los Últimos Tiempos entre mis manos como las plegarias que obtendrán la conversión y el arrepentimiento de mis hijos en estos Últimos tTempos.
En Montechiari anuncio las tres rosas que me rodearán mi corazón. La rosa blanca es la oración, pero representa a Dios Padre, Tierno y Misericordioso. La rosa roja es el sacrificio, pero representa al Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús. La rosa dorada es la penitencia, pero representa a Dios Espíritu Santo. Y, a ti te he obtenido de mi Hijo para que seas heraldo, mensajero, anunciador y precursor que grite por toda la tierra que los hombres alcen su mirada y su corazón para ver la gran aparición de la Mujer Vestida del Sol, la gran señal de los Últimos Tiempos.
Mi Hijo, un día te coronó con tres espinas, una a cada lado de tu cabeza y otra en el centro de tu frente. Hoy, a esas tres espinas las ha go florecer con mis tres rosas que rodean mi Corazón Doloroso e Inmaculado. Y así, mi amor maternal te adorna, para ofrecerte como alma víctima por la santidad de la Iglesia, de los sacerdotes, de los religiosos.
Deseo que mi Doloroso e Inmaculado Corazón, como la Mujer Vestida del Sol, sea entronizada en todas partes: Iglesias, seminarios, conventos, monasterios y hogares.
Que tengan todos mis hijos, mi pequeño heraldo, la Gran Señal de apocalipsis 12 entronizada en todas partes.
Mi pequeño coronado de espinas y rosas te beso, te bendigo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Ave María Purísima, sin pecado original concebida.