Queridos apóstoles de mi Sagrado Corazón, deseo hablarles de un gran regalo de mi Divina Misericordia para toda la humanidad, y es el regalo de la Corredención de mi Mamá Celeste para todos los hombres.
Hijos, mi Madre escogida por Designio Divino y Eterno ha sido la Corredentora desde el inicio de la historia de la salvación, cuando se profetizó que aplastaría con su talón Inmaculado a Satanás.
Mi Madre, María, es la Corredentora en mi Ministerio Salvífico: Al interceder en las Bodas de Caná se reveló la Omnipotencia Suplicante de mi Amada Mamá y al declararla como Madre de los hombres, cuando estaba al pie de mi Cruz, y será la Corredentora Asunta al Cielo y Coronada como Reina y Madre de todo lo creado.
Mi Madre, María, es la Corredentora de sus almas y esta Gracia de María Corredentora es el regalo que salió de mi Sagrado Corazón cuando manifesté mi Misericordia a los hombres en la Cruz. Y es por esta Gracia de mi Madre que el mundo se salvará, la Iglesia se renovará, y todos los acontecimientos anunciados son una clara intervención de mi Madre Corredentora.
Hónrenla como la Corredentora y Medianera de todas las Gracias.
Les amo y les bendigo, Jesús el Buen Pastor que ama a su rebaño.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Ave María Purísima, sin pecado original concebida.