Los dones que Jesús les entrega desde su Corazón abierto.
Escribe, pequeño de Nuestros Sagrados Corazones Unidos. Comprende que, cada gracia, don de amar y carisma, son dados a las almas como regalo de la gran misericordia.
Esa misericordia que ha sido manifestada y entregada por mi Hijo Jesucristo en la Santa Cruz del Calvario, desde su Sagrado Costado abierto que es la puerta, es velo, el camino que les ingresa en el Santo de los Santos: su Sacratísimo Corazón, fuente de toda gracia para las almas.
Contigo, pequeño, yo deseo ingresar al Corazón de mi Hijo, que le ames y le conozcas y hagas todo lo que Jesús te pida.
Te amo y te bendigo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Ave María Purísima, sin pecado original concebida.