Queridos hijos de mi Casto y Amante Corazón:
Los invito a abrir sus corazones a la acción de Dios, para que el Padre y el Hijo y el Santo Espíritu puedan inundarlos de la Luz Divina para que puedan comprender, conocer, y, sobre todo: amar los planes de Dios que tiene para con la Obra Magna de Jesús y de María. Y, amando a este Divino Querer sean auténticos apóstoles de los Sagrados Corazones Unidos.
Nuestros tres santos Corazones quieren llevarlos al Corazón del
Padre que es el mismo Corazón de su Hijo. A través del Apostolado, Dios quiere salvar a todas las almas. ¡Escuchen! y ¡vivan! estos últimos Llamados de Amor y de Conversión.
Yo, el Justo San José, con mi Casto y Amante Corazón los bendigo.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.