Sobre el secreto
Nuestra Señora se me ha aparecido, como siempre se aparece:
Manto dorado, vestido blanco, manos juntas y su Corazón Doloroso e Inmaculado con la Espada y las Tres Rosas.
Me ha hablado del secreto, de su preocupación Materna para que el mundo la escuche.
Ha bendecido el Retiro Eucarístico-Mariano de octubre con gran alegría
Nos ha dado su Bendición Maternal
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.