Adorado sea el Sagrado Corazón Eucarístico de Jesucristo.
Queridos hijos:
Los invito a abrir el corazón para que sus espíritus estén prestos para responder a estos últimos Llamados de Amor y de Conversión.
Amados hijos míos, los exhorto a vivir estos últimos avisos del Cielo.
Nuevamente, les digo que, el futuro de la humanidad depende totalmente de la respuesta que el mundo brinde a los últimos Llamados de Amor y de Conversión.
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Ave María Purísima, sin pecado original concebida.